Las Pedroñeras. Capital del ajo morado

Dirigimos nuestros pasos a la comarca de la Mancha para visitar uno de los pueblos más especiales que habitan en ella. Nos referimos a Las Pedroñeras, municipio conocido por ser la cuna del famoso ajo morado, el cual posee distintivo de Indicación Geográfica Protegida. Pero también es conocida esta localidad por tener uno de los cascos antiguos más bellos de la provincia de Cuenca. En él podemos apreciar maravillas monumentales como la casa palacio de los Molina o la plaza de la Constitución, que alberga la iglesia parroquial, la residencia de los Jesuitas y la casa consistorial.

Nos introducimos en el núcleo urbano desde la anteriormente citada N-301. Al tomar la avenida Juan XXIII nos pareció ver a lo lejos un edificio religioso. Sin pensárnoslo dos veces acudimos a resolver nuestras dudas. El resultado fue maravilloso. Tras aparcar el auto pudimos comprobar que el templo observado era la ermita del Santísimo Cristo de la Humildad (s. XVII-XVIII). Tras contemplar su coqueta portada lateral, nos fijamos en el edificio anejo. Perfectamente podíamos habernos caído de espaldas, pero simplemente nos quedamos embobados admirando la fachada de la casa palacio de los Molina (s. XVIII). No exageramos si decimos que es una de las casas solariegas más bellas desde que comenzamos a zascandilear hace varios años. Con dos plantas, destaca su portada con columnas de orden jónico y su hermosa rejería en balcones y ventanas.

Ermita del Santísimo Cristo de la Humildad. Fuente: Zascandileando por Cuenca

Tomamos la calle Las Cruces hasta desembocar en la plaza de la Constitución. Supone el centro neurálgico de Las Pedroñeras, albergando tres de sus edificios más importantes. El primero de ellos es el templo más importante en la villa. Nos referimos a iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción (s. XVI). Se construyó en dos etapas gracias a Juan Florez padre, e hijo. En el conjunto conviven los estilos gótico tardío y renacentista.

Iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción. Fuente: Zascandileando por Cuenca

A derecha se ubica la antigua residencia de los Jesuitas (s. XVI). Consta de dos plantas y estilo renacentista. Además de una bella balconada, se puede apreciar una portada principal y otras dos puertas de medio punto a los lados de la fachada principal. En el otro extremo de la plaza, frente a la iglesia, se localiza el ayuntamiento de Las Pedroñeras (s. XVIII). Posee planta rectangular y dos pisos. El superior tiene cinco balcones, estando coronado por una torre con reloj.

Antigua Residencia de los Jesuitas. Fuente: Zascandileando por Cuenca

Salimos a la calle Sepulcro y, tras caminar recto unos minutos, nos plantamos en la ermita del Santo Sepulcro. Es una de las manifestaciones más importantes dentro del patrimonio religioso de la villa. Se levantó en mampostería, cubriéndose posteriormente con cal. Se puede observar un bello pórtico, cuyo origen están en la antigua iglesia de la pedanía de Robledillo de Záncara. La reja de entrada indica la fecha 1924, aunque desconocemos si es el año de su construcción.

Ermita del Santo Sepulcro. Fuente: Zascandileando por Cuenca

Un poco más adelante se encuentra el museo del ajo y etnográfico, junto al jardín del Sepulcro. Volvimos hacia la calle Montejano y anduvimos hasta toparnos con la casa Parroquial. En este bello edificio nos llamó la atención que en su interior había un coro ensayando. Lo hacían bastante bien, la verdad. Tomamos la calle Montoya para aterrizar en la plaza Cruz Cerrada.

Casa Parroquial de Las Pedroñeras. Fuente: Zascandileando por Cuenca

Aquí comenzamos nuestra ruta de casonas, y es que, a través de calles como Pelazo y Cea Bermúdez, pudimos contemplar edificios civiles extraordinarios como la casa de la Condesa, la casa Zapata y la casa de los Ortega. Hicimos un pequeño inciso en esta ruta para bajar a la calle General Borrero y admirar otro de los templos importantes de Las Pedroñeras. Hablamos de la ermita de San Julián. Su construcción es anterior a la de la iglesia, en torno al siglo XV. Consta de una sola nave dividida en tres tramos cubiertos por bóvedas de arista. El altar del cabecero data del siglo XVIII. En el exterior podemos reseñar su bella espadaña de piedra.

Ermita de San Julián. Fuente: Zascandileando por Cuenca

Continuó la ruta subiendo hacia la plaza de la Reina, donde se halla la casa Mendizábal (s. XVII). Es del mismo tipo que las anteriores, es decir, planta rectangular, dos pisos y portada de piedra. Tomamos la calle Mayor para observar la casa Bosch, última de las edificaciones que veríamos aquella tarde en Las Pedroñeras. Antes de poner fin a nuestra visita, decidimos que nos habíamos ganado un refrigerio. De este modo, por recomendación de nuestro amigo José Luis Martínez, antiguo compañero de estudios y oriundo de la localidad, pusimos rumbo al disco pub Cris. Un sitio estupendo. Le damos las gracias a José Luis por ello y por ser tan buen embajador de su pueblo.

Típica casa solariega en Las Pedroñeras. Fuentes: Zascandileando por Cuenca

Esta vez sí, nos dirigimos al auto, aparcado en la calle Santo Cristo. Sin duda nos quedamos maravillados con el inmenso patrimonio religioso y civil que posee Las Pedroñeras, uno de los más completos de toda la provincia de Cuenca. Por supuesto, su visita es totalmente recomendable. El turismo de interior está de moda, y la Mancha es una de las comarcas más interesantes para visitar en España. No te lo pienses.

Museo del Ajo y Etnográfico. Fuente: Zascandileando por Cuenca

La principal actividad económica del municipio gira en torno al cultivo, manipulación y comercialización del conocido ajo morado. Esta variedad posee diferencias morfológicas y fisiológicas debido a las condiciones climáticas y del suelo que se ofrecen en la zona de cultivo. Este espacio está abarcado por 227 localidades pertenecientes a las provincias de Cuenca, ToledoCiudad Real y Albacete, concentrándose sobre todo en las comarcas de la Mancha y la Manchuela.

Monumental fuente dedicada al ajo morado. Fuente: Zascandileando por Cuenca

El ajo morado de Las Pedroñeras tiene el sello de Indicación Geográfica Protegida (IGP). Este distintivo le otorga protección internacional, así como reconocimiento, prestigio y singularidad. Con el fin de integrar al mayor número de productores, dar a conocer sus bondades y mejorar la calidad de la materia prima, se crea en 2010 la Asociación IGP Ajo Morado de Las Pedroñeras. Desde 1973 se celebra en la villa la Feria Internacional del Ajo de Las Pedroñeras, la más importante del sector actualmente.

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